Un grupo de investigadores de instituciones científicas estadounidenses creó un nuevo antibiótico que actúa contra una amplia gama de microorganismos patógenos “intratables” sin provocar resistencia bacteriana, por lo que su uso reduciría el riesgo de propagación de enfermedades infecciosas que son difíciles de tratar con los fármacos existentes, informó la Universidad de California en Santa Bárbara.
La resistencia a los antibióticos, o resistencia antimicrobiana (RAM), sucede cuando los organismos que causan una enfermedad tienen la capacidad de mutar con el paso del tiempo, adaptándose de manera que pueden sobrevivir a la exposición de medicamentos que anteriormente podían eliminarlos o controlarlos.
La Organización Mundial de la Salud considera a la RAM como una de las principales amenazas de salud pública a nivel mundial, puesto que es la causante de 1,27 millones de muertes al año, siendo los países de ingresos bajos y medianos los más afectados.
De acuerdo con los autores de la investigación, publicada en la revista eBioMedicine, el desarrollo del nuevo fármaco ocurrió mientras se diseñaba una clase de pequeñas moléculas sintéticas denominadas oligoelectrolitos conjugados (COE, por sus siglas en inglés), las cuales iban a ser empleadas para cargar eléctricamente los teléfonos celulares de los soldados de EE.UU. cuando estuvieran en combate.
Sin embargo, se descubrió que algunos de estos compuestos, al ser colocados en membranas bacterianas con el propósito de funcionar como transportadores de electrones, también podían inhibir el crecimiento de las bacterias. Ante este hallazgo, el equipo científico se planteó que estos oligoelectrolitos podían utilizarse como posibles antibióticos.