De acuerdo con datos oficiales de aquella época, el sismo causó la muerte de 26.000 mil personas
Entérate24.com- El 26 de marzo de 1812, un Jueves Santos, Venezuela es sacudida por un fuerte terremotos de 7,7 grados en la escala de Richter, que ocasionó la muerte de millares de persona.
Ese día los fieles católicos se encontraban congregados en las iglesias, cuando sintieron el fuerte movimientos telúrico que destruyó las ciudades de Caracas, Barquisimeto, Mérida, El Tocuyo, San Felipe y causó estragos en otras poblaciones.
De acuerdo con datos oficiales de aquella época, el sismo causó la muerte de 26.000 mil personas Caracas 10.000; La Guaira 3.000; Mérida 5.000; Barquisimeto 4.000 a 5.000 y San Felipe 3.000.
Esta situación fue aprovechada por los frailes y sacerdotes realistas, quienes predicaron que había sido un “castigo divino” por alzarse contra Fernando VII, poniendo a las masas contra la Primera República y minimizando la resistencia a la reconquista de Domingo de Monteverde.
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Debido a ello, el Libertador, Simón Bolívar, trepó por sobre las ruinas hasta llegar a hasta donde estaban predicando los frailes, para emitir unas palabra a la ya asusta población.
“En su semblante estaba pintado el sumo terror o la suma desesperación, indignación, apartó a uno de los frailes predicadores, para pronunciar un vehemente discurso en el que explicó que aquel lamentable fenómeno sísmico era un simple fenómeno natural ajeno a las ideas religiosas y políticas. Y terminó su intervención, me vio y me dirigió estas impías y extravagantes palabras: ‘Si la naturaleza se opone a nuestros designios, lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca’”, relató un venezolano furibundo partidario del Rey, José Domingo Díaz.
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